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argot sexual, Cincuenta sombras de Grey, cubiertas, eufemismos sexuales, literatura, novela erótica, novela histórica, novela romántica, novela rosa, posturas, sexo, traducción literaria
Hablo de «sensualidad» pero en esta entrada la temperatura va a subir unos grados. Si alguien es propenso a las arritmias, le aconsejo que deje de leer. Tampoco es apta para los que se escandalizan con facilidad.
Además de dar un repaso a la traducción de la literatura romántica (la rosa, vamos, no la de Victor Hugo) y la erótica, al final veremos un poco el trasvase (EN-ES) de las expresiones sobre amor y sexo que suelen encontrarse en estos libros. [En realidad tenía ganas de hablar de este tipo de vocabulario; lo de las novelas rosas era una excusa.]
Tipología
Para empezar, existen varios tipos de novela rosa o romántica, dependiendo de la época en la que esté ambientado o el tipo de historias o tramas que se desarrollen.
En primer lugar tenemos la novela romántica histórica, que si bien abarca varios tiempos y lugares, en general suele estar ambientada en la edad media, la Regencia británica y la Época victoriana (Inglaterra y Escocia del siglo XIX). En este apartado situaríamos también las famosas novelas que tienen como escenario las Highlands y unos cachas con kilt en las portadas.
Las protagonistas suelen ser jovencitas vírgenes o inexpertas sexualmente, en ocasiones abandonadas a su suerte, cuyo arroz está a punto de pasarse. Pero, no temáis, encontrarán al mozo de buena familia que caiga rendido a sus pies y las salve de una vida solitaria rodeadas de libros, gatos o flores que regar (no, no lo digo en broma).
La redacción de estas novelas suele ser más ligera en cuanto a contenido sexual. No hay referencias explícitas al sexo y sí muchas metáforas e imágenes. Por ejemplo, no pierden la virginidad, las desfloran, así como tampoco existe el «clitoris» ni «clit», sino «a delicate nub». Lo mismo pasa con los labios menores, que pasan a ser «folds of flesh». Las pobres no llegan al orgasmo pero sí a «la petite mort«, así, en francés, que queda más fino.
Además suelen tener un vocabulario propio que le dé la pátina histórica que necesita. He aquí un diccionario romántico donde poder entender muchas de estas palabras. La primera novela que traduje fue de este tipo y os aseguro que me costó sudor, lágrimas y no sangre pero sí muchas consultas en los foros de Proz. Abundan las descripciones de paisajes, edificios (caserones con salones de distinta denominación) y, sobre todo, de la ropa que se llevaba entonces. (No veáis la de capas que se ponían encima… Así duraban los preliminares lo que duraban, entre quitar refajos, ligueros, enaguas, corsés…)
Otra dificultad en estas novelas es el tratamiento de los personajes debido a las marcadas clases sociales. Algo tan nimio como puede parecer el «you» en inglés tiene enjundia en la traducción. Si a veces ya cuesta saber si es mejor traducirlo por tú o por usted, aún es más difícil cuando hablan dos jóvenes del siglo XIX. ¿En qué momento empiezan a tutearse? En general yo opto por hacerlo cuando ya han intimado pero, claro, delante de otros personajes que no lo saben hay que conservar el usted. ¡Imaginad el revuelo que provocaría que se supiera que la damisela de buena familia se ha revolcado en el pajar con el mozo de cuadra! En definitiva, que no es tan fácil como parece aunque sí muy divertido.
En segundo lugar tenemos la novela romántica contemporánea, que cuenta con varios subgéneros. Está el juvenil (saga Crepúsculo, aunque este se mezcla con el género sobrenatural y con mucha contención sexual, sobre todo porque la señorita Meyer es mormona), el suspense (que encabeza Nora Roberts, con libros cuyas historias parecen tramas de una película dominguera de esas que tanto gustan en Telecinco o Antena 3) y las novelas llamadas chick lit en el mundo anglosajón («chick» por chica en inglés estadounidense y «lit» por literatura).
Estas se centran en los problemas de pareja y de sexo. Las protagonistas son mujeres liberadas, jóvenes profesionales en su mayoría, que suelen tener dificultades para encontrar pareja o un novio que les sea fiel y viven en una gran ciudad: Nueva York (novelas de Candace Bushnell), Londres y Dublín (libros de Marian Keyes), entre otras.
Aquí prima la naturalidad y el lenguaje suele ser más fresco y desenfadado. Hay mucho argot y, según la autora, es posible que haya también palabras malsonantes (lo veréis al final de la entrada). Al fin y al cabo lo que se pretende es reflejar la vida cotidiana.
Por último está el romance fantástico o paranormal, con historias de todo tipo. Las hay cuyas protagonistas viajan por el tiempo o bien están ambientadas en la época actual pero existen mundos paralelos, o submundos, con criaturas de lo más variopinto. El año pasado traduje un par de novelas de este tipo en los que la heroína luchaba contra unos seres deformes adictos al sexo.
Apartándonos un poco del romanticismo en sí, encontramos las novelas eróticas, a las que pertenece la célebre serie de E. L. James (Cincuenta sombras de Grey o Fifty Shades of Grey; título, por cierto, con un juego de palabras difícil de adaptar). Bueno, romance hay pero no nos engañemos: aquí hay tomate.
Foto del gran éxito de ventas con otra novela del estilo con portada parecida y exacta publicidad en el adhesivo (aunque la editorial es distinta). ¿Coincidencia? No lo creo.
En esta nueva ola literaria, las protagonistas experimentan con juegos sexuales, bondage, sadomasoquismo, etc., y tanto el sexo como las referencias anatómicas son mucho más explícitas. Aquí ya no «se introducen en…» sino que «penetran», por poner un ejemplo básico. Sin embargo, es curioso que a la hora de traducir muchas editoriales piden rebajar o suavizar el tono.
Mi última traducción ha sido Pleasure’s Edge (Eve Berlin), un libro precisamente de este tipo en el que la protagonista quiere explorar el mundo del BDSM para su próxima novela. Podéis imaginar el grado de investigación para algo así y la cara que se te queda cuando te sorprenden buscando imágenes en Google de los juguetitos en cuestión. Porque, no sé vosotros, pero yo no suelo encontrar en mis textos términos como «paddle», «cane», «flogger», «cuffs» y menos aún juntos. Lo bueno es la riqueza de vocabulario que adquieres; aprendes a distinguir bien los látigos de las fustas y las palmetas, por ejemplo.
Un flogger o látigo
También descubres cosas que ni imaginabas que existían, como los «vampire gloves»: unos guantes de cuero con unos pinchitos para que la experiencia del azote sea más gratificante. Y, claro, esa es otra. La de prácticas y posturitas que uno aprende con un libro así…
Con todo, por muy macarras que parezcan algunas escenas, el texto tiene que resultar elegante (si lo es el original también, claro) y eso es complicado. Para mí, las escenas de sexo son las que cuestan más de traducir. No es un manual de instrucciones donde debas introducir la clavija en el enchufe; el acto en sí debe fluir (no pun intended) y resultar natural.
Las lectoras
Siempre ha habido una gran demanda de novela romántica y erótica, y las lectoras (sí, la mayor parte son mujeres) se reúnen, forman clubes y foros. De hecho son casi un lobby y, dicho por una editora, suelen ejercer bastante presión.
Cuando empecé a traducir libros de este tipo descubrí la página de Autoras en la sombra. Es una especie de foro de lectoras muy profesional donde escriben artículos y se mantienen al día en cuanto a las novedades editoriales tanto nacionales como extranjeras. ¡Ah! Y tienen un apartado con reseñas y críticas en la que a veces se despachan a gusto con el traductor.
Y lo mejor, igual que pasa con los fansubs, aquí también hay traducciones pirata. Muchas de estas novelas no llegan a ver nunca la luz en nuestro país, o tardan en hacerlo, y ellas se encargan de traducirlas. Como son novelas de grosor considerable la mayoría de las veces las hacen entre varias, con el consiguiente batiburrillo de estilos (y de errores).
Las famosas cubiertas
Seguramente hayáis visto a alguien leer un libro en el metro con las tapas forradas (con papel de regalo, de periódico o, las más profesionales, con fundas de plástico). Lo más seguro es que debajo se esconda una novela romántica y no es que el lector quiera protegerla del sudor de las manos, sino de las miradas indiscretas.
Reconozcámoslo, llaman mucho la atención porque las hay que son muy kitsch. Las imágenes más recurrentes son torsos embadurnados de aceite, parejas que no pueden dejar de tocarse o, como decía antes, el hombretón escocés con la espada desenvainada (literal). Si queréis reír un rato, en esta página encontraréis los diez elementos clave a tener en cuenta para una cubierta de lo más cursi.
Análisis gráfico de una cubierta
Afortunadamente la tendencia está cambiando. Hace tiempo que las lectoras piden cubiertas más elegantes o, al menos, más discretitas. En este sentido, muchas editoriales norteamericanas han optado ahora por una doble cubierta: una más seria en la que consta únicamente el título y la autora, y otra debajo con la imagen tórrida (y el hombre con el torso desnudo otra vez).
Aunque parece que en esto de las cubiertas, los videojuegos no se quedan atrás y muchas veces el modelo ha hecho doblete, como Fabio Latanzi en Ironsword y luego en incontables cubiertas del género.
El lenguaje
Como todo, el lenguaje empleado depende mucho de la tipología de la que estemos hablando. Una novela histórica suele estar redactada con expresiones más contenidas y referencias sexuales veladas mientras las más contemporáneas no tienen tapujos para hablar de posturas y juguetes sexuales, por ejemplo.
Veamos una pequeña colección de vocabulario que abunda en estas novelas y que vale la pena conocer (no solo para traducir). Muchas de las expresiones aquí recogidas son malsonantes, así que recomiendo prudencia.
Si queréis descargarlas, las tenéis en este documento: Glosario sensual.
1. Descripciones físicas
Para ambos sexos:
He’s / she’s cute | Es mono/a |
He’s / she’s hot | Está bueno/a |
He’s / she’s sexy | Es sexy |
He’s / she’s fit | Está bueno/a; tiene un buen tipo… |
He’s / she’s stunning | Es impresionante |
He’s / she’s tasty | Está para comérselo/a |
He’s / she’s a hottie (AE) | Está muy bueno/a |
He’s / she’s got it going on (AE) | Está cañón; está como un tren… |
Para ellas:
She’s a babe | Está buena |
She’s smokin’ hot (AE) | Está como un tren |
She’s bangin’(AE) | Está cañón |
She’s phat (AE) | Está buenísima (phat son las siglas de “pretty hot and tempting”) |
She’s got a nice rack (AE) | Tiene pechonalidad |
She’s got great jugs | Tiene unas tetas enormes |
She’s got great pups (BE) | Tiene unos buenos melones |
She’s got eggcups (BE) | Tiene dos peritas |
She’s got a nice ass (AE) | Tiene buen culo |
She’s flat | Está plana |
She’s flat as a pancake | Está más plana que una plancha |
She’s got saddlebags | Tiene cartucheras |
She’s a butter-face | Está buena pero es fea/es un callo (butter-face viene de “everything’s fine but her face”) |
Y no olvidemos:
She’s got great… | Tiene unas… espectaculares |
…tits, knockers, hooters (AE), jugs, boobs, puppies (BE) | …tetas, peras, brevas, melones, domingas, lolas. |
En cuestión de genitales encontramos de todo. En las novelas históricas (o románticas más suaves) lo más normal es que hablen de «cleft» (hendidura) como eufemismo para la vagina. En las más modernas se lee más «pussy» y en mucha menor medida «cunt» (este término puede resultar muy ofensivo y en general se usa para insultar a alguien).
En contextos informales y humorísticos puede encontrarse también «va-jay-jay«. De hecho, si buscáis por Internet descubriréis que quien popularizó la expresión fue la mismísima Oprah Winfrey.
En español tenemos muchos nombres también, claro. Tenemos el clásico, «vagina», que se usa bastante si no se quiere ser soez y también «vulva», pero este último lo reservaría para textos más divulgativos, no para los literarios. Otros sinónimos informales (y de tinte soez) son: «chocho», «coño», «conejo», «chumino», «almeja», «potorro», «chirri» y «concha» (más latinoamericano). Claro que, en pos de la corrección y la elegancia, muchas veces opto por hablar de «su sexo».
Para ellos:
He’s well hung | Está bien dotado |
He’s got a nice package | Tiene un buen paquete |
He’s got great pecs | Tiene un pectoral para comérselo |
He’s totally ripped | Está cachas |
He’s bluff / a hunk / a beefcake | Está muy cachas |
He’s got a six-pack | Tiene tableta de chocolate |
He’s got man boobs | Tiene tetas (porque está rollizo, vamos) |
He has a beer gut/belly | Tiene tripa cervecera |
He has love handles | Tiene michelines (pero a la inglesa suena tan bien…) |
He has rolls (AE) / tyres (BE) | Tiene michelines |
Y sus genitales:
…dick, cock, shlong (AE), willie (AE) | …polla, nabo, rabo, cimbrel (y un «largo» etcétera) |
testicles | testículos |
balls | huevos, cojones, pelotas, bolas, saco de nueces… |
En romántica, muchas veces se le denomina «shaft».
2. Las actitudes
En el caso de las féminas:
She’s a… | Es una… |
bitch | puta, guarra |
skank (AE) | puta de mierda |
hoebag | golfa, puta |
slapper (BE) | zorra, puta |
tart (BE) | puta, putilla |
slut | guarra, puta putilla |
dog (BE) | zorrón / fea, un callo |
prude/frigid | muy mojigata/frígida |
flirt | ligona |
(cock)tease | calientapollas/calientabraguetas |
easy | fácil |
ho | golfa |
hoochie (AE) | zorra |
stuck-up | creída, estúpida… |
tight-ass | estrecha |
Y en el caso de los varones (y barones si se trata de romance histórico, aunque el vocabulario no suele ser tan crudo):
He’s… | |
a gentleman | es un caballero |
all talk | habla mucho |
a flirt | es un ligón |
a tease | es un golfo |
a player | es un ligón |
a womanizer | es mujeriego |
a creep | es asqueroso |
a scumbag | es un cabrón |
a slaze | es un cerdo |
an arsehole (BE) / asshole (AE) | es un hijo de puta, mamonazo… |
a dick | es un gilipollas, imbécil (literalmente: polla) |
a wanker (BE) | es un gilipollas, imbécil (literalmente: pajillero) |
a freak | es un friqui |
a dumb jock | está cachas pero es tonto |
a prick | es gilipollas |
Y cuando los personajes se enfadan, hay para todos:
You’re such… | Eres… |
a numpty (BE) | lelo, cortito |
a moron | subnormal |
an airhead (AE) | un cabeza hueca, panoli |
a nitwit | un papanatas |
a dumbass | imbécil |
a numbnuts (AE) | gilipollas |
Si se quiere atacar a un hombre por su cornamenta se le puede llamar «cuckold«, un término que en inglés también puede usarse como verbo transitivo.
3. Las relaciones
Los momentos buenos:
We’re just fooling around / messing around (AE) / It’s just a bit of fun | No tenemos nada serio. / Nos lo pasamos bien y listos. |
We got it on. | Lo hemos hecho. |
We’re friends with benefits. | Somos amigos con derecho a roce. |
We’re fuck buddies / fuckfriends / shag buddies (BE) | Solo follamos / Somos follamigos. (dudando con el término, quizá no lo pondría por escrito aún) |
We got together. / We’re going out. | Estamos saliendo. |
Los no tan buenos:
Let’s just be friends. | Podemos ser amigos. |
Let’s take a break. | Démonos un tiempo. |
I need some space. | Necesito más espacio. |
We should see other people. | Deberíamos quedar/salir con otras personas. |
I’m not ready for this. | No estoy preparado/a para una relación. |
It’s not you, it’s me. | No es culpa tuya; es solo mía. |
It’s over. / We’re through. | Se acabó. |
I’ve met somebody else. | He conocido a alguien… |
4. Los tratamientos
La verdad es que hay de todo, como en castellano, y depende de la relación que se tenga en la pareja. Aquí están los más habituales:
baby, babe | cariño |
sweetie | cielo |
my love | amor, cariño |
honey / honey bunch | cielo |
dear | querido/a |
sweetums | churri |
gorgeous | guapo/a |
sexpot | bombón |
boo (AE) | mi niña, cariño |
5. La acción
Bésame, bésame muuuuuucho…
Give me a smooch. | Dame un besito. |
We made out. | Nos hemos liado. |
They got off with each other. | Se morrearon. |
He kisses like a washing machine / like a wet fish. | Besa como una lavadora en pleno centrifugado… (más o menos ya os lo imagináis) |
He fished for my tonsils. | Me besuqueó (y no convenció, vamos) |
There was a bit of tonsil action / tonsil hockey going on. | Me dio unos besos impresionantes, de tornillo, de infarto… / Nos liamos… |
They were snogging at the party | Se estaban liando en la fiesta. |
Si la cosa empieza a calentarse…
Can we go somewhere quieter? | ¿Buscamos un sitio más tranquilo? |
Do you want to come in for a coffee / for a drink? | ¿Subes a tomar un café, una copa…? (buena excusa) |
I’m horny, baby. | Estoy cachondo/a. |
Do me. | Fóllame. |
Cuando la cosa está que arde hay varias opciones. Tenemos el típico «make love» para hacer el amor, pero en muchas de las novelas de romance contemporáneo o las eróticas muchas veces se emplean otras expresiones, como:
We fucked, screwed, banged (AE), shagged (AE) | Hemos follado, echado un polvo, echado un quiqui/kiki… |
En las de romance juvenil o cuando las referencias son más veladas suele recurrirse a un «we did it» (lo hicimos) o a algo que deje la duda en el aire como «we hooked up» (AE) o «we shacked up» (BE) que puede entenderse también como liarse.
Otras formas:
We slept together. | Nos hemos acostado. |
We spent the night together. | Hemos pasado la noche juntos. |
I went home with him/her. | Me fui a su casa (y no jugasteis al parchís, seguramente) |
Aunque si se quiere alardear un poquito, siempre es mejor usar fórmulas como «he pulled last night» (BE) o «he scored last night», vamos, que el machote pilló cacho.
Si el sexo con otra persona no basta, siempre se puede recurrir a un «threesome» (trío) o un «foursome» (sexo con cuatro personas) o incluso a un «moresome» (me imagino que aquí ya equivale a orgía, «orgy«). Si la chica es la última fémina dentro de un grupo de hombres, lo más seguro es que estemos delante de un «gangbang«. En fin, que hay nombres para todo tipo de realidades.
En cuanto a otras prácticas, tampoco podemos entrar al detalle porque son innumerables y muchas son trasladables al 100% («French kiss«, «Greek kiss«, «golden rain/shower«…) pero sí hago una breve mención a algo que me resultó curioso: una «cubana» en inglés es «Dutch fuck«. ¿A qué se deberá el cambio de nacionalidad?
Y hasta aquí el repaso más textualmente encendido de las novelas romántico-eróticas y su vocabulario. ¿Hay algo que os haya sorprendido?
Javier Pérez Alarcón dijo:
Vamos, que cuesta más traducir una de estas novelas que escribirlas 😛
enlalunadebabel dijo:
Bueno, va, no les quitaremos mérito a las autoras pero lo cierto es que cuesta más traducirlas de lo que pueda parecer en un primer momento 😉
¡Gracias por comentar!
amrikgp dijo:
¡Hay que ver qué bien te expresas, mujer! Me ha gustado mucho la entrada. Así como curiosidad, por si te aburres, el libro ese de la foto (No te escondo nada) lo he leído en inglés y tiene algunas perlas que evocan imágenes bastante explícitas y al final empecé a saltarme las partes porno por aquello de que mejor practicarlo que verlo, o leerlo en este caso :P. Una que me chocó especialmente fue «cleft», que ya te puedes imaginar a qué hace referencia y no sé cómo lo habrán traducido en español pero igual alguna se lleva un susto 😉 Saludos y hasta la próxima.
enlalunadebabel dijo:
Vaya, gracias; ¡me ruborizo!
Me alegro de que te haya gustado.
Es verdad, ¡no he hablado de «cleft»! Y eso que es la palabra por excelencia para evitar hablar de la vagina. Sí, claro, como pongas «ranura» se van a pensar que es como una hucha de esas tipo cerdito…
Muchas gracias por pasarte y comentar 🙂
Kaede dijo:
Madre mía qué pedazo de entrada. Me encanta porque es súper divertida a la par que ingeniosa y útil (el enlace al diccionario me lo apunto).
Yo me estoy dando cuenta de que últimamente está muy de moda la literatura erótica en general. Empezó con Crepúsculo que levantó la estima que se le tenía a las novela romántica que parecía que solo estaba diseñada para mujeres adolescentes o treintañeras solteronas, si algo me gusta de Crepúsculo (como calidad literaria me parece un fiasco) es que ensalzó un género y consiguió que lo leyese todo tipo de personas. Pero poco a poco la cosa ha ido «subiendo de tono» y ahora con la saga de Cincuenta Sombras ya está llegando a unos topes que creo que ese género siempre aspiró pero nunca logró, ¡en muchas ferias como la de Frankfurt se hablaba de la reedición de Las edades de Lulú y todo!
Así que me parece genial tanto tu artículo como la consolidación de este género que siempre había estado tan descuidado, así (y en tu artículo lo dejas claro) podemos ver que no es una tontería y que este tipo de literatura (y su consiguiente traducción) es un trabajo muy serio que lleva igualmente muchas horas de labor y trabajo.
Un placer leerte.
enlalunadebabel dijo:
Hola Kaede,
¡Me alegro de que te haya gustado!
Sí, todo depende de las modas. Con «Harry Potter» todos eran magos y brujas; con «Crepúsculo» resurgieron los vampiros y los hombres lobo y con «Cincuenta sombras de Grey» se pone de moda la novela con tintes eróticos. El mercado manda, claro. Lo que comentas de reeditar «Las edades de Lulú» me parece muy fuerte XD
La cuestión es que no se considera alta literatura (porque no lo es), se cree que es poco más que porno para mujeres, pero es una forma fantástica de que la gente lea y se mueva el mundo editorial.
Y como cualquier otro texto, hay que tratarlo con cariño. Para mí, aunque suene a cursilada, traducir es más que un trabajo 😉
¡Gracias por dejar tu comentario!
MTatay dijo:
¡Hola, Scheherezade!
Me ha parecido superinteresante la entrada, tengo una amiga que le encantan este tipo de novelas y nunca me habría imaginado que llevaran tantísima documentación detrás, ¡guau!
Hay dos cosas que me han llamado la atención, la primera es el término freak, que siempre me lleva de cabeza. Nunca sé si tiene la mismas conotaciones que el «friqui» español o si la idea de friqui que tenemos en la cabeza se asemeja más a la palabra nerd.¿Cuándo equivale a ser un rarito y cuándo a ser un empollón cuatro ojos?
Luego está el término fuckfriends, a día de hoy se utiliza mucho el término «follamigos», pero no lo contemplas aquí en la tabla, ¿es porque todavía no está muy extendido o porque piensas que el registro puede ser demasiado bajo y sería mejor decir «rollo de una noche» o «nos acostamos de vez en cuando»?
Muchísimas gracias y perdona por molestar, son una pejiguera!
enlalunadebabel dijo:
¡Hola!
Pues la verdad es que sí, sobre todo si son históricas. Puede parecer una tontería pero hay muchas cosas a describir. En el caso de los edificios victorianos se ve más. ¿Cómo se diferencia una «morning room» de una «drawing room» cuando ambas son una especie de salón? Por no hablar de los múltiples cargos y trabajos alrededor de una casa así, entre ama de llaves, ama de cría o crianza, mozo de cuadra, etc.
Buena observación lo de «freak». De hecho puede equivaler a «nerd» o a «weirdo» también, ¿no? Ahora que lo pienso, lo añadiré a la tabla 😉
Sí, a lo de «fuckfriends» le he dado varias vueltas. Se oye «follamigo» pero no sé si lo escribiría. Quizá lo describiría, al menos de momento. En cuanto a rollo de una noche, eso es «one night stand» mejor, ¿no?
Y no molestas, al contrario, ¡me encanta hablar de estas cosas y que haya diálogo!
¡Un abrazo y gracias por comentar!
MTatay dijo:
Ay, por cierto, ahora me acaba de venir a la mente. Hay un libro que se titula «Inglés para pervertidos», donde vienen también glosarios e incluso ejercicios para practicar, ¡también es otra buena fuente de documentación!
http://inglesparapervertidos.com/
enlalunadebabel dijo:
¡Qué bueno! No lo conocía pero para la trilogía que me espera no estaría mal echarle un vistazo.
¡Muchísimas gracias, María!
Raquel Amado Martínez dijo:
Soy estudiante de tei y, aunque voy por interpretación, no descarto dedicarme a la traducción. La verdad es que nunca me había parado a pensar en la traducción de estas novelas y los problemas que plantearían, pero es muy interante, y me he reído muchísimo con tu entrada. Tengo que reconocer que mi nivel de vocabulario en expresiones sensuales en inglés es muy bajo… con esto me puedo hacer un glosario lol .
Y creo que a partir de ahora desconfiaré de todas las que lleven libros forrados en el metro… Muchas gracias por la entrada!
enlalunadebabel dijo:
Hola Raquel:
La verdad es que las expresiones que me encuentro a veces no tienen desperdicio. Ahora que lo pienso no he puesto «beefcake», que es uno de esos tíos cachas (a lo «hunk»)… y un término muy gráfico que me encanta 😀
Si tengo tiempo, recogeré estas tablas en un pdf y lo subiré para que os lo podáis descargar si queréis. Nunca se sabe cuando se pueden necesitar, jejeje.
Exacto. Seguro que ya no las mirarás con los mismos ojos…
¡Gracias por comentar!
sergionunezcab dijo:
¡Me ha encantado la entrada! Lo has explicado todo de forma muy amena y detallada. Debes de pasártelo en grande traduciendo estos textos debido a la libertad (hablo de «correctitud) con la que puedes jugar. Por cierto, ¿qué te parecen las opciones «follamigos» y «ser un/una gamba» para «fuck buddies» y «butter-face», respectivamente? Es que las he escuchado y leído mucho y a lo mejor te sirven de algo para darle un poco de variedad al asunto (en la traducción literaria toda opción es buena).
Lo dicho, has abordado el tema a la perfección y las imágenes (así como los enlaces) no tienen desperdicio. ¡Enhorabuena! Espero tu siguiente entrada.
Sergio Núñez Cabrera
Traductor literario y subtitulador en-es
enlalunadebabel dijo:
Hola Sergio:
La verdad es que para hablar de según qué cosas es mejor reír un poco. De lo contrario sería un tostonazo :S
Sí, lo de «follamigos» parece cada vez más extendido aunque no recuerdo haberlo visto por escrito (aún). Y lo de la gamba lo he visto también por internet pero no sé hasta qué punto lo primero que piensas al leerlo es que esa persona es fea. Yo quizá, de momento, lo describiría como «tiene un polvazo/está buenísim@ pero de cara es un callo». Como comentas en literaria tienes más libertad y no debes preocuparte por las restricciones de espacio y tiempo de unos subtítulos, for instance.
Muchas gracias por los comentarios. Me alegra muchísimo de que te haya gustado.
¡Un abrazo, Sergio!
Andrés Rojas Toro dijo:
Concuerdo con los colegas. Cualquiera podría pensar que estas novelas/libros son más bien banales y que en consecuencia su traducción sería muy fácil!!!
Estupenda entrada. Felicitaciones!
enlalunadebabel dijo:
¡Muchísimas gracias, Andrés!
Está claro que no es la misma complejidad que traducir un manual técnico sobre turbinas, por ejemplo, pero tienen su complicación, sobre todo los fragmentos más subidos de tono. Sin embargo, no niego que me lo paso bien traduciéndolas; son diferentes 🙂
Un abrazo,
Scheherezade
davidoffberlin dijo:
Felicidades por la entrada. Yo he traducido un par o tres de novelas románticas (una de ellas romántica paranormal: aún sufro las secuelas) y siempre he tratado de despacharlas lo antes posible. Por eso me admira tu meticulosidad documental y el buen humor que parece que conservas, pese a las páginas y páginas de machotes a la caza y captura de mozas cachondas.
Lo de las cubiertas (que no portadas) tiene su qué. Desde hace tiempo se comenta que el libro electrónico ha sido uno de los grandes aliados de los lectores de novela romántica (http://www.nytimes.com/2010/12/09/books/09romance.html?_r=2&ref=technology&), por aquello de que nadie te mira raro en el metro. (Parece mentira que los editores no lo pensaran antes).
P. D. Lo de «he kisses like a washing machine» me ha llegado al alma.
enlalunadebabel dijo:
Hola David:
Para empezar, ¡muchas gracias! Desde luego, la mejor manera de abordarlas es con un poquito de humor aunque a veces sudo al enfrentarme a los párrafos más tórridos…
El artículo me ha encantado: «…sinewy limbs, flowing, Fabio-esque locks or, as she put it, “the mullets and the man chests.” Veo que el tal Fabio Latanzi causó estragos.
¡Ah, y lo de los besos es todo un mundo! Al fin y al cabo nosotros tenemos también los de tornillo, ¿no?
Thanks again!
Adriana Fernández dijo:
¿Besa como una lavadora en pleno centrifugado? ¡Me ha encantado!
enlalunadebabel dijo:
Jajaja, hay que ponerle un poquito de humor aunque la pobre que sufra ese beso dudo que piense lo mismo 😉
¡Gracias por pasarte!
Dalia Puertas (@dali22a) dijo:
Hola, Súria: También me ha encantado esta entrada en el blog tan extensa y documentada. Igual te copio la lista de insultos para mi lista de insultos en videojuegos 😉
enlalunadebabel dijo:
Hola Dalia:
¡Gracias; es un placer!
Pues tú misma, toda tuya (la lista, digo ;))
¡Saludos!
Isabel dijo:
Me ha gustado mucho esta entrada, aunque también podrías haber incluido una lista con ropa interior, sobre todo porque hay cierta confusión con «panties» que nos son nuestros panties sino bragas (conozco alguna anécdota de una amiga traductora y lo he oído en alguna serie).
Saludos
Anna dijo:
Felicidades por la entrada, me ha encantado. Me sabe mal que cuando se habla de traducción de libros siempre se tiende a destacar grandes clásicos y «obras de arte», y esconder estos «géneros menores» que llegan a un montón de lectores y que merecen una traducción atenta como el que más. Aunque sean el equivalente literario de comer palomitas, las palomitas también pueden —y deben— estar bien hechas. Y me apunto los glosarios como referencia (aunque lo mío es el catalán, nunca se sabe).
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Anamar González dijo:
¡Muchas gracias por la entrada! ¡La disfruté desde el título hasta el punto final! Y tu «pequeña colección de vocabulario es ¡una joya!
Como traductora y escritora de relatos eróticos estoy muy consciente de las dificultades que conlleva tanto escribir como traducir este tipo de literatura. Hasta ahora no he tenido la fortuna de que me asignen la traducción de novelas o cuentos eróticos, pero ¡cuanto me gustaría! No solo por mi interés por el tema, sino por el reto que implican los estilos y el lenguaje. Mis relatos son bastante explícitos, lo cual supone una dificultad aun mayor a la hora de traducirlos. Te comento que para escribir una hace más o menos el mismo esfuerzo de investigación. Y como bien acotas: «La de prácticas y posturitas qye una aprende»…
Olatz Rodríguez dijo:
¡Hola! Soy una estudiante de Traducción e Interpretación de la Universidad del País Vasco y he estado siguiendo vuestros blogs fielmente durante los últimos meses. Además me encanta la literatura (de hecho estoy haciendo un curso con Cálamo&Cran) y tus entradas siempre son geniales. Hoy he decidido dar el paso de crear el mío propio y este es el enlace: http://www.olatztranslatesandinterprets.com/
Estaría muy agradecida y me ayudarías a difundirlo y que compartamos nuestras cosas de aquí en adelante.
¡¡¡Muchas gracias y hasta pronto!!!
Aurea dijo:
¡Hola! A mí también me llama la atención el cambio de nacionalidad que se observa de «cubana» a “Dutch fuck“. También cambia en otros idiomas: en francés se habla así de «branlette espagnole». Muy curioso.
Eduardo Sánchez Gauto dijo:
Dos observaciones: 1) «Dutch fuck» se traduce en mi país (Paraguay) como «paja rusa»; en Argentina como «paja paraguaya», o «paraguaya» a secas; a veces usan alguna otra nacionalidad que ahora mismo no recuerdo. Es decir: por alguna razón ese acto está ligado a gentilicios 😉
2. El vocablo _shlong_ debe ser en realidad escrito como _schlong_ . Le faltó la «c».
Saludos 🙂
LaB dijo:
Que sí, «una cubana» en inglés es «a Dutch fuck», y en italiano?… «una spagnola»! 🙂 http://it.wikipedia.org/wiki/Spagnola__(sessualità)
Asha dijo:
Como lectora habitual de literatura romántica-juvenil/erótica/paranormal, me ha encantado la entrada. Aunque sea literatura «de McDonald’s», como dicen algunos, y su calidad sea entre baja y mala, me lo paso pipa leyéndolo tanto en inglés como en español. Y me encanta comentar con los amigos posibles traducciones para los términos que suelen usar.
The Pursuit of Translation dijo:
¡Fabulosa entrada! Me ha encantado, sobre todo, la parte de las portadas.¡Ahora ya sé por qué a veces veo en el metro a mujeres con un libro forrado con una funda de estampado de florecitas! Yo, personalmente, me he leído la trilogía 50 Sombras y hasta el segundo libro de la trilogía Crossfire. Como bien indicas, no solo las portadas son similares, sino el contenido de ambas. Me leí primero la trilogía 50 Sombras (que parece ser la «madre» de esta nueva moda de la novela erótica) y, después, empecé con a trilogía Crossfire. El primer libro de esta última, para qué engañarnos, es prácticamente la misma historia que 50 Sombras de Grey (chica inexperta y virgen; empresario rico a los 30 años y con un físico impresionante…). Sin embargo, debo decir que en el segundo libro, la trilogía Crossfire se desvía un poco mas de 50 Sombras. En cualquier caso, debo decirte que me parece verdaderamente útil tu entrada, especialmente, la colección de vocabulario. ¡Hay qué saberlo todo! 😉
Magda HC dijo:
Acabo de leer esta entrada buscando un poco de inspiración para el experimento Moonlight, en el que estoy tomando parte. La verdad es que jamás he traducido nada erótico antes y la experiencia está siendo interesante y enriquecedora, pero desde luego más complicada de lo que a primera vista pueda parecer, como explicas.
Mi comentario va colación de lo último que comentas en la entrada: la cubana, que en el mundo anglosajón se convierte en danesa. Resulta que este término, y, en general, las posturas sexuales con nombres gentilicios, tienen más chica de la que parece y varían bastante de un lugar a otro. Para los alemanes, la cubana pasa a ser una española. Para los griegos, nuestro griego se convierte turco, cómo no. El francés parece ser casi universal. Pero vamos, que estoy segura de que investigando un poco se vería lo mucho que varían estas denominaciones según el lugar geográfico.
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Cíes dijo:
¡Qué entrada más interesante y a la vez divertida!
Como alternativa a «fuck buddies» para evitar el término «follamigos» yo pondría «amigos con beneficios» o «amigos especiales», o el típico «amigos con derecho a roce», quedan algo mejor que «follamigos», ya que, como bien dices, no suele verse escrita, y menos en novelas.
¡Saludos!
Anjana dijo:
Muchas gracias por tu reflexión. Me ha resultado muy interesante y útil; sobre todo porque es un tipo de traducción del que se habla muy poco y que presenta unas particularidades que son dignas de destacar. ¡Un saludo!
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Abril dijo:
¡Hola, Scheherezade! ¡Me encantó, me encantó esta entrada! Muy divertida y útil. Mi sueño es dedicarme a la traducción de este tipo de novelas y he leído, no sé, cientos de autoras como LIsa Kleypas, Elizabeth Hoyt, Meagan McKinney y muchas más. Mis favoritas con las de romance histórico pero también me gustan las paranormales y chick-lit.
Me gustaría comentar que los «caballeros» de las novelas de Hoyt está usando últimamente «cunt» con bastante frecuencia, por lo que este tipo de novelas están subiendo un poco el termostato. De hecho, cuando leí 50 sombras, no me sorprendió mucho después de haber leído Worth Any Price, de Lisa, y realmente palidece al lado de La Bella Durmiente de Anne Rice (por si alguna quiere comprarlo, aviso que no pude terminar de leerlo, es too much).
Soy traductora técnica y literaria, formada en uno de los mejores institutos de Argentina. Si algún día no das abasto con el trabajo, contá conmigo. 🙂
¡Saludos!
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